5º gen: En Matrix se olvida a los padres en los días de su vejez, se abandona a los ancianos a su suerte, se desprecian los cabellos blancos… Por otra parte, se honra a los fuertes, se protege a los ricos, se engrandece a los soberbios. En pocas palabras, se somete a los más débiles, mientras nos dejamos someter por los poderosos .
El corazón de Matrix bate al ritmo de una rebelión abierta y descarada contra el Creador y contra su quinto gen: “Honra a tu padre y a tu madre” (Éxodo 20:12). ¿A quién ofrezco yo mi honor y respeto?.
6º gen: En Matrix hay manos que se estrechan tras los bancos de las iglesias, manos hipócritas, manos que hacen cosas que no se cuentan (de otro modo, quien sabe lo que pensarían las otras manos… y se escandalizarían). Manos que matan a los pobres con el hambre, a los débiles con la fuerza, a los extraños con la exclusión, a las minorías con la difamación, a los sencillos con la indiferencia, a los ignorantes con el escarnio, a los humildes con la humillación, a los enfermos con la marginación… Manos que se alzan a espaldas de los hermanos. En pocas palabras, la debilidad de muchos en Matrix es explotada por la sed de poder de unos pocos.
El corazón de Matrix bate al ritmo de una rebelión abierta y descarada contra el Creador y contra su sexto gen: “No matarás” (Éxodo 20:13). ¿De qué parte estoy yo? ¿De la parte de las víctimas o de la de los verdugos?.
7° gen: En Matrix está de moda el “aquí y ahora”, se evitan los sacrificios, se odian las renuncias, se ama lo nuevo a expensas de lo viejo, se estimula la mentalidad del “usar y tirar”, se alaba la total libertad sexual… En pocas palabras, el consumismo en Matrix es un virus que ha envenenado también a las relaciones humanas más íntimas y frágiles.
El corazón de Matrix bate al ritmo de una rebelión abierta y descarada contra el Creador y contra su séptimo gen: “No cometerás adulterio”(Éxodo 20:14). ¿Qué revelan mis pasiones más secretas?.
8° gen: En Matrix reinan los ladrones. Basta echar un vistazo al mundo de la política y de los negocios matrixianos, para percibir notables injusticias sociales a todos los niveles. Quien más tiene, conoce las formas más lujosas y elegantes para eludir el control público, guardándose en los bolsillos el dinero que pertenece a la colectividad, recurriendo a principios de “fisco creativo”. En pocas palabras, el ladrón con el cuello blanco, la chaqueta y la corbata es en Matrix muy a menudo una persona importante e influyente. Desgraciadamente, cada vez más, incluso el pequeño empresario y el ciudadano privado se adapta a este modus vivendi poco transparente y muy sumerjido en la ciénaga negra del mal hacer.
El corazón de Matrix bate al ritmo de una rebelión abierta y descarada contra el Creador y contra su octavo gen: “No robarás” (Éxodo 20:15). ¿Poseo yo verdaderamente sólo lo que es mío?.
9° gen: En Matrix existen las mentiras blancas. La falsedad es cada vez más excusada como una inocua omisión por el bien de algo. En Matrix la mentira más grande es “la ley es igual para todos”. Los más acaudalados pueden permitirse consultores cínicos que se adentran en los meandros de la jurisprudencia deformándola a su propio gusto y placer. En pocas palabras, hay mentirosos que son juzgados como culpables, y mentirosos que son ascendidos.
El corazón de Matrix bate al ritmo de una rebelión abierta y descarada contra el Creador y contra su noveno gen: “No dirás falso testimonio contra tu prójimo” (Éxodo 20:16). ¿Mis labios y mis comportamientos dicen siempre la verdad?.
10° gen: En Matrix los ciudadanos viven con el temor de poder parecer pobres, ostentan lo que tienen y envidian todo el resto, luego lo compran, para estar constantemente por encima del prójimo. Hacen lo que quieren que sea conocido públicamente, gastan, derrochan y son lo que tienen.
El corazón de Matrix bate al ritmo de una rebelión abierta y descarada contra el Creador y contra su décimo gen: “No codiciarás la casa de tu prójimo; ni desearás la mujer de tu prójimo, ni su siervo, ni su sierva, ni su buey, ni su asno, ni cosa alguna de tu prójimo” (Éxodo 20:17). ¿Qué sueño siguen mis aspiraciones más profundas?.