La cima de la pirámide jerárquica matrixiana está firmemente bajo el control de una casta. Esta casta se compone de hombres oscuros que se dividieron de una forma invisible para mí; dominando cada ámbito de mi vida, de mis aspiraciones y de mis experiencias.

  • La casta matrixiana gobierna la política de mi sociedad, desenmantelando cada vez más el estado social que todavía garantizaba un mínimo de dignidad proporcionándome al menos los servicios esenciales como ciudadano.
  • La casta matrixiana controla la economía a través de las finanzas, drenando dinero público y desgastándome como cliente el mismo tiempo.
  • La casta matrixiana guía la religión a través de tradiciones/ritos/sacramentos y doctrinas dejándome hambriento espiritualmente como miembro fiel.

Jesús anuncia el fin de la casta matrixiana: “Vosotros líderes políticos/económicos/religiosos ¡escuchadme! Mis fans fueron abandonados para ser robados, y sirven de comida a todos los buitres matrixianos, porque vosotros los líderes gobernáis para vuestros intereses personales y no a favor de la colectividad. Por lo tanto, escuchadme líderes de las naciones/bancas/religiones: Aquí estoy contra vosotros líderes; os demandaré a mis fans; os haré dejar de gobernarlos; vosotros, líderes matrixianos no os gobernaréis ni siquiera a vosotros mismos; yo arrancaré a mis fans de vuestra boca y su sudor y sus lágrimas ya no estarán más a disposición de vuestra vergonzosa codicia” (Ezequiel 34:7-10)