Jaque mate es una situación del juego del ajedrez en la cual el rey de uno de los jugadores es puesto bajo ataque directo (jaque) y no tiene modo de solucionarlo con otras piezas o de moverse a una casilla libre de la amenaza de captura inmediata. Hacer jaque mate es el objetivo primario del juego del ajedrez y la partida termina con la victoria del jugador que ha conseguido poner en esta condición al rey adversario. Sin embargo, en la práctica el jugador se rinde antes de estar en la condición de jaque mate.

Mi estrella polar me advierte perentoriamente que el Creador Dios en su omnipotencia, y en virtud de su inmenso amor por todas sus criaturas, dio hace tiempo jaque al principe de Matrix, es decir, el ex Lucifer, consintiéndole abandonar sus objetivos perversos y rebeldes, volviendo a los brazos de su padre ceslestial, exactamente como la parábola del hijo pródigo me cuenta tan eficazmente. Sí, aunque me pueda parecer increíble, pero tal parábola que me cuenta Jesús se aplica in primer lugar justamente a este ángel caído.

¡Ay de mi! , el príncipe de Matrix, ya literalmente devorado de su delirio de omnipotencia, ha rechazado orgullosamente esta amorosa oferta de reconciliación y de vida, matando brutalmente al hijo unigénito Jesús, que se encarnó en la tierra como embajador del padre y portador de este llamado salvífico de reconciliación hacia todo lo creado. Y lo más triste es que tal ser, una vez maravilloso y resplandeciente hasta tal punto de haber sido nombrado portador de luz, está rabiosamente buscando arrastrar con sí en esta vorágine sangrienta de la muerte el número más alto posible de criaturas de la raza humana.

Pero no debo tener miedo… es más, puedo gozar. El jaque mate divino ya proximo permitirá a la locura del mal apresurarse libre y voluntariamente hacia la autodestrucción. Y será hecha justicia. (ver Apocalipsis 18:20)