Yo venceré. 

No por gloria mía

Sino por la gloria de mi Creador,

¡Yo venceré!

Creador, eres tú que me has formado. Yo soy precioso a tus ojos, soy estimado y tu me amas. ¡Sí, tu me amas!

Tú no me has rechazado, es más, yo soy tu siervo y tu amigo. Tú me has tomado de los confines de la tierra, llamándome desde tierras lejanas. Sí, yo no temo porque tú estás conmigo. No me turbaré porque tu eres mi Dios. Tu me fortaleces y me socorres, sosteniéndome con la diestra de tu justicia.

Cuando atraviese las aguas, tu estarás conmigo.

Cuando atraviese los ríos, ellos no me anegarán.

Cuando camine en el fuego, no me quemaré y la llama no me consumirá.

No temeré porque tú estás conmigo.

He aquí todos aquellos que se enojan contra mí, serán confundidos y avergonzados. Mis adversarios serán reducidos a nada y perecerán. Yo los buscaré y no los encontraré.

Aquellos que litigaban conmigo, aquellos que me hacían la guerra, serán como nada, como algo que deja de ser, porque tú eres mi Dios.

Tú fortificas mi mano derecha y me dices: “¡No temas, yo te ayudo!”

Yo venceré.

No por gloria mía,

sino por gloria de mi Creador,

¡yo venceré!

 

(versión Christian Style de Isaías 43:1-5 y 41:8-13)