Es medianoche en Matrix y las diez vírgenes duermen serenamente posadas en su falsa certeza de estar:

  1. despiertas espiritualmente porque conocen de memoria los escritos de los profetas del pasado
  2. ricas espiritualmente porque siguen al pie de la letra todos los preceptos y mandamientos bíblicos

Pero Jesús hace cerca de dos mil años, siendo ya perfectamente consciente de este peligro, elaboró con mucho anticipo una solución a este problema. Él, en su inmensa sabiduría e infinito amor por sus criaturas de los últimos días, está seleccionando personalmente a sus fans que no han doblado sus rodillas ante el príncipe de Matrix, para despertar a las diez vírgenes. Y como si hubiese una undécima virgen, (invisible al ojo humano, no siendo un grupo oficial y homogéneo, ) que es despertada con anticipación con una misión única y precisa: lanzar un grito en la oscuridad y silenciosa medianoche matrixiana.

Esta virgen permanece invisible en la parábola de las diez vírgenes narrada por el propio Jesús, en la cual se erige de la nada un grito de una entidad no especificada que avisa a las vírgenes de la llegada del esposo tan esperado. Pero tal entidad emerge claramente en el libro de Apocalipsis en el capítulo 18 en el cual se profetiza la venida de un grito/mensaje de despertaar. Sí, este ángel/mensajero de apocalipsis 18 es la undécima virgen… un grupo invisible al ojo humano, pero fuerte y humilde a los ojos de Jesús, portador del carácter puro y santo del Creador Dios.